Polvo maduro


Desde que perdí la virginidad, siempre me han interesado sexualmente los hombres maduros.
Me imaginaba como seria follar con ellos, me tumbaba en la cama y fantaseaba con un hombre haciéndome sexo oral tocándome ,tocándole o tocándonos … follándome hasta llegar al orgasmo jugando con mis juguetes eróticos...
Hasta que un día decidí ir a la carga a probar con uno. No estaba dispuesta a seguir imaginándome con alguno, quería sentirle.
Me inscribí a una red social en la que parejas y chicos solos buscaban pasarlo bien y yo ahí estaba propuesta a pasármelo bien con todos ellos.
Un día un hombre me llamó muchísimo la atención… y aún pienso el motivo… no sé si fue la manera de hablar o el qué, pero como tenía esa semana la casa sola le dije que viniese, él estaba de acuerdo y le di mi dirección. Estuve bastante nerviosa hasta su llegada, pensando en si fuese como me imaginaba, mejor, peor… y cuando me di cuenta ya estaba tocando mi timbre.
En cuanto abrí la puerta, sin mediar palabra me estampó de cara a la pared, cerró la puerta y se pegó a mí, colocando su paquete en mi culo… cogió mi mano y lo puso en su paquete dejándome palpar su erección, mientras con la suya me acariciaba el culo, el cuello... separando mi pelo se acercó a mi oído y me preguntó que dónde era el sitio adecuado para hacerme correr que si quería hacerlo ahí mismo, en la cama o en el sofá. Mientras pensaba la respuesta me hizo poner el culo en pompa, y besando mi espalda y mi culo comenzó a bajarme las braguitas y separando mis muslos se lamió un dedo y empezó a introducirlo en mi vagina.
Cuando me di cuenta estábamos en mi cama yo encima de él introduciéndome su tremenda polla y mirándole la cara de placer, esos ojos en blanco que me ponía cachonda. Con sus manos me acariciaba el culo. Subía, bajaba me atraía hacia él para comerme los pezones y darme un buen morreo y yo mientras colocaba mis manos en su pecho haciendo fuera bajaba subía mas rápido, mas lento según como me venía notaba mi orgasmo a punto de florecer hasta que el mismo me hizo frenar y me empujó a un lado. Me cogío como si fuese un muñeco colocándome a 4 patas cogió su polla que tanto esperaba y la volvió a introducir… me tumbé dejando solo la parte del culo en pompa… él la metía, la sacaba la metía la sacaba tocaba mi clítoris hasta que finalmente y por fin, me corrí.
Él me dijo que lo que deseaba era correrse en mi boca con una gran mamada… le miré a los ojos y me la metí en la boca... Y no paré hasta hacerle satisfacer.

1 comentario:

Elisabet C. Con la tecnología de Blogger.